domingo, 4 de marzo de 2018

CINCO CERDITOS - Agatha Christie






Confieso que no había leído nada de Agatha Christie hasta este año, pese a que todo apuntaba que era una autora que me iba a gustar. ¿Sabéis cuando te recomiendan tantísimo un autor o novela que acabas cogiéndole tirria antes de leerlo? Pues eso me había pasado a mí hasta el año pasado. Pero entonces leí Hyde - un retelling de Diez Negritos-, y vi Asesinato en el Orient Express. Y sus historias me fascinaron por completo. Entonces vi la película antigua de Muerte en el Nilo y tuve claro que tenía que leer algo de ella. Así que aprovechando que iba a dar una charla sobre novela negra y thriller, solicité un ejemplar a Espasa - muchísimas gracias a la editorial por cedérmelo- y me puse con él. Me ha encantado, sin duda ha merecido la pena la espera por completo: ese crimen tan extraño, esos giros de la trama, la extraordinaria pluma de Agatha Christie...  elementos que hacen de Cinco Cerditos una novela apasionante.

Cinco Cerditos nos presenta a un ya algo mayor detective Poirot al que acude la joven Ccarla Lemarchant. La muchacha está a punto de casarse, pero no puede hacerlo hasta que se resuelva un crimen de su pasado: el asesinato de su padre por el que fue procesada su madre. La mujer, antes de morir, le escribió una carta a su hija, asegurándole su inocencia. Así, Poirot aceptará un caso no ya sólo difícil sino casi imposible: el escenario ya no es el mismo, algunos de los que participaron en el juicio están muertos, el paso del tiempo ha hecho mella en los implicados y  la policía no está por la labor de desempolvar un caso que ya dan por resuelto. Pero no hay nada imposible cuando se trata de Monsieur Poirot.


“No tenía dudas, ni remordimientos…, ni piedad tampoco. Pero ¿puede uno esperar piedad en la radiante juventud? Esa emoción es más bien característica de la edad madura, fruto de la experiencia”.


Sólo hubo cinco personas el día del crimen en la casa además de la víctima - el pintor Amyas Crale- y su esposa Caroline: la hermanastra de esta, Ángela; su institutriz Miss Williams,;los amigos de Crale: Philip y Meredith Blake; y su joven amante y musa: Elsa Greer. Al ritmo de la inglesa canción de cuna This little piggy - cuyos versos dan lugar a cada título de capítulo-, el detective irá visitando a cada uno de ellos, recopilando sus testimonios, solicitándoles que escriban su relato con lo que recuerde cada uno y comparándolos entre sí. Una vez hecho esto, enfrentará a todos ellos, para dar su veredicto. Es muy curioso como cada persona percibe de una manera u otra una determinada actitud o hecho del pasado y cómo este acaba determinado cómo seremos en el futuro. Tuve mil teorías durante toda la historia y aunque me acerqué bastante, la autora no me decepcionó y desbarató todas ellas.

El libro se divide en tres partes: la primera con todas las visitas del detective para conocer a cada uno de los implicados; la segunda recopila los relatos de cada uno de ellos mientras que en la tercera tiene lugar el desenlace donde Hércules Poirot los reúne a todos, les cuenta sus hallazgos y desenmascara lo que sucedió realmente.


“La naturaleza es roja en diente y garra, no lo olvides”.


Los personajes son polos opuestos por completo: Elsa fue una chica egoísta, que se enamoró por completo del artista y a la que le dio igual siempre si tenía que romper una familia. Phillip y Meredith son las dos caras de una moneda: el primero era un corredor de bolsa, íntimo amigo de Amyas y que despreciaba a su esposa, mientras que Meredith era algo taciturno, idolatraba a la mujer de su amigo y era aficionado a la botánica. Miss Williams, fue una mujer recta que cuidaba de Ángela y Carla y que despreciaba la actitud de Amyas. Por otro lado, Angela era una niña traviesa y rebelde, que amaba profundamente a su hermana Caroline, la cual es curioso cómo cada uno percibe de una forma diferente, y la cual vivía marcada por un horrible evento de su pasado en el que desfiguró a su hermana. A causa de ello, siempre la ha protegido y ha intentado compensarla por ello. Aguantó siempre los amoríos de su marido pero todos - salvo Ángela- creen que esta vez fue demasiado y cometió el crimen. ¿El arma? Envenenamiento con cicuta, una sustancia que robó del laboratorio de Meredith Blake.

Es precisamente Caroline, quien no aparece en ningún momento, quien ha sido mi personaje favorito. Su presencia empapa toda la historia y el descubrir cómo era en realidad y cómo la veía cada uno, me pareció fascinante. Tiene un gran peso, aún cuando ya hace años que murió, en todos los personajes. 

Se trata de una novela con una prosa muy fluida, con una historia que te engancha desde la primera línea. Curiosamente con pocas descripciones visuales pero sí con detalles que el lector no debe despreciar a la ligera. Seguir las pesquisas de Hércules Poirot es una auténtica delicia, cómo no se le escapa nada y parece ir diez pasos por delante que el propio lector. Una entiende por qué Agatha Christie es considerada una de las maestras indiscutibles de la novela negra.


En definitiva, Cinco cerditos es una historia fascinante del detective Poirot, donde pasado y presente se encuentran para intentar desentrañar un crimen que aún dieciséis años después sigue afectándoles. Una novela con un ritmo increíble, constantes giros y un desenlace espectacular.


3 comentarios:

  1. Es una muy buena novela, además es una de las novelas en que mejor están caracterizados los personajes, Un saludo cordial desde el sur argentino. Luis https://sobrevolandolecturas.blogspot.com.ar

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  2. Holaaa
    Ya sabes que la disfruté mucho, y me encantó el final
    Me alegra mucho que lo hayas disfrutado :D
    Un besazo!

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  3. Hola! Recientemente me leí "Asesinato en el Orient Express" (también vi la película), y me gustó mucho. Debería leer más de Agatha Christie... ¡Me lo apunto!
    Un saludo!

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